Project Description

¡AQUÍ HAY MUCHO TRABAJO QUE HACER!

Fue el 29 de octubre de 2007, a eso de las 4 de la tarde, cuando llegamos por primera vez a la comuna de Comin Yanga. Para llegar hasta allí hicimos unos 300 Km desde la capital Ouagadougou hasta Fada N’Gourma, la última ciudad con cara y ojos del trayecto, en la cual cogimos el desvío sin cartel que nos llevaba a nuestro destino. Tras unos 80 Km por pista de tierra, con muchos más baches que curvas, y salvando un par de ríos secos, llegamos a Comin Yanga por primera vez.

Tras un rápido picnic a base de bocadillo de sardinas y zumo de coco (era todo lo disponible en el «súper» de Fada) nos dispusimos a conocer la aldea. Se trata del centro nuerálgico de una vasta zona en la cual viven unas 15.000 personas, diseminadas irregularmente por toda la tierra disponible, en pequeños núcleos familiares de chozas de adobe y paja. Comin Yanga dispone de los edificios construidos por los franceses antes de la independencia, una escuela de educación primaria, una escuela de educación secundaria, una maternidad y un dispensario, son edificios de una sola planta, pequeños, mal mantenidos y en algunos casos en ruinas.
Visitamos la escuela primaria, estaban dando clase, eran 6 aulas, en las cuales daban clases más de 600 niños, hacinados en el suelo. Tras la escuela visitamos la maternidad, un pequeño edificio, sucio y sin material médico donde nacían unos 90 niños al mes. El dispensario fue el último edificio que visitamos antes de que anocheciera, en él el doctor atendía a oscuras a los enfermos tendidos en el suelo, sobre colchones rotos.

No hizo falta ver más, ni hablar mucho entre nosotros, en ese viaje íbamos 6 personas, Sara, Rosa, Xavier, Gifré, Teresa y yo (Gonzalo), nos miramos y supimos que esta aldea necesitaba nuestra ayuda.

Desde entonces hemos rehabilitado la maternidad y el dispensario, hemos comprado material médico, camillas y medicinas, hemos financiado tratamiento de la malaria a niños, salvando más de 200 vidas, hemos rehabilitado la escuela primaria, ampliándola con una séptima aula nueva, hemos comprado pupitres nuevos para las 7 aulas y las hemos dotado de electricidad y luz mediante sistemas solares. Hemos construido un nuevo pozo de agua, y por último, este año 2011 hemos inaugurado una nueva escuela secundaria de 4 aulas, donde podrán estudiar más de 300 niños.

Como veis el proyecto de Comin Yanga se basa en la construcción de infraestructura básica.

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